Si eres gallego, sabes lo que es una comida familiar en condiciones. O si eres un Jorge Casanovas de la vida y tienes más hermanos que puntos de liga, claro. Desde el abuelo de tu prima segunda hasta el sobrino de tu hermano que se fue a Argentina, la larga e infinita mesa en la que siempre predomina una buena ensaladilla rusa es una imagen icónica de las llamadas «aldeas» gallegas.
Entre los protagonistas están roles muy diferentes. Desde el niño que solo juega con la maquinita (mi abuelo la solía llamar «Gamboya») hasta la tía pesada que tiene que saludar a todo el mundo varias veces. Algunos con más poder en las discusiones (o más fuerza en la voz, claro), otros con pocas palabras pero mucha rapidez para llevarse todo a la boca.
Vale, ahora os plantearéis… Miguel, ¿qué narices estoy leyendo? Estás viendo el Campeonato Mundial desde los ojos de aquel que conoce a todo el mundo. Conoce sus virtudes y sus defectos, sabe de sus diferencias, pero los aprecia a todos por igual. Todos son familia, todos vienen a ganar pero muchos saben que no pueden. ¿Mi objetivo? Presentaros a la familia que veremos en nuestras pantallas en unas semanas. Hoy comienza esta serie de artículos con SuperMassive.
Una carrera llena de baches
Turquía ha tenido un verano complicado. La región representa a ese niño pequeño chillón que presume de padres ricos pero, a pesar de tener herramientas de sobra, no acaba de demostrar su valía. Dominar en la fase previa del Invitacional de Mitad de Temporada le valió de poco a SuperMassive, un conjunto que acabó siendo arrollado por la sorpresa vietnamita una vez más materializada en EVOS Esports.
Una escuadra a la que no le gusta que le saquen de su comodidad. Desde julio hasta agosto, su verano parecía tener un final muy poco feliz. El equipo empezó bien a pesar del metajuego de magos, pero a partir de la segunda jornada ya se empezaron a ver muchas debilidades. En una liga con un formato al mejor de uno es posible perder contra un equipo inferior, pero no de esa manera.
La debacle comenzó en la vuelta del Rift Rivals. A pesar de una fuerte demostración contra rusos y vietnamitas, con una venganza incluida a EVOS Esports, en el segundo partido tras el torneo internacional llegó una derrota inesperada contra HWA. La predilección de Berkay “Zeitnot” Aşıkuzun por Ezreal dejó caer que el tirador no estaba pasando su mejor momento con campeones como Swain y justo cuando Varus y Jhin ganaron popularidad el equipo se derrumbó.
Cuatro derrotas seguidas del histórico de Anatolia hicieron pensar a los seguidores de la liga que SuperMassive ya no era favorito. A pesar de quedar segundos en la clasificación de la fase regular, Royal Bandits estaba lleno de jugadores habilidosos y se había mostrado muy dominador: en las últimas series de verano, SuperMassive ya no podía alcanzarlo y se quedó a cuatro victorias de distancia, irónicamente las mismas partidas que aquella mala racha de agosto.
Sí, SuperMassive se repuso una vez más y demostró por qué es el equipo turco con más actuaciones internacionales de la historia. Sacó su veteranía y se alzó por 3 a 1 tanto contra 1907 Fenerbahçe en semifinales como frente a Royal Bandits en la gran final. Pero, aunque el marcador muestre resultados ligeramente contundentes, sobre la grieta no fue tan sencillo.
SuperMassive mantiene la misma plantilla exactamente que en primavera. Tiene el mismo entrenador y mantiene un eje de dos coreanos y tres turcos. Sin embargo, esta edición ha sido mucho más sufrida y su historia podría tener un fin cercano. Este Campeonato Mundial tienen un reto muy importante: demostrar que han aprendido a no relajarse tras lo sucedido hace unos escasos meses en Alemania.
Si algo funciona para qué cambiarlo
En las dos series de los «playoffs», SuperMassive ha mostrado debilidades. Si en primavera se hablaba de un conjunto turco sólido en estrategia que nadie podría barrer en fase de grupos del MSI, ahora se habla de un quinteto que genera dudas. Son buenos jugadores, tienen experiencia y un estilo de juego claro. Pero también han sufrido mucho y expuesto sus debilidades constantemente.
La primera preocupación que genera este equipo es su eje superior. Tanto
Asım Cihat “fabFabulous” Karakaya como Furkan “Stomaged” Güngor son dos veteranos de guerra que en su propia región saben como sacar maravillas de un error, pero fuera no va a ser tan sencillo. Enfrentarse a campeones como Kindred, Trundle o Graves, los cuales pueden invadir siempre y cuando tengan prioridad, suele dejar muy por detrás al jungla de SuperMassive.
El equipo lo compensa con una buena respuesta en el uso del Teleportar. A pesar de tener dos coreanos en el equipo, fabFabulous se entiende perfectamente con la calle inferior y su uso de Urgot, Rumble, Aatrox o cualquier tanque encaja perfectamente cuando tiene que defender a sus compañeros de una acometida rival. Esto provoca que muchas veces no controle bien su propia oleada, pero sí gana la escaramuza. Aun así, siguen siendo la escuadra más solvente en macrojuego del país que conecta Asia con Europa por el Bósforo.
La solución que más ha funcionado a sus rivales, con jugadores como Sergen “Broken Blade” Çelik y Berke “Thaldrin” Demir, ha sido atacar mecánicamente con presión la torre de arriba. La vuelta a un metajuego en el que el tirador es importante favorece a SuperMassive por la constancia de Zeitnot y la infinita lista de campeones de Lee “GBM” Chang-seok, por lo que esas dos líneas no deberían sufrir incluso contra equipos ligeramente mejores.
En selección de campeones, SuperMassive es predecible pero aun así efectivo. No se anda con preocupaciones: suele escoger prioridades propias y bloquear aquellos campeones que son muy efectivos en el rival. Un ejemplo claro fue no dejarle bajo ningún concepto el famoso Draven de
Aleš “Freeze” Kněžínek en la final o dejar a GBM jugar campeones que le son cómodos como Xerath u Orianna en momentos importantes.
Por último, como estilo de juego SuperMassive podría sufrir especialmente contra equipos asiáticos. El eje de Trundle y Braum, así como el Xin Zhao de Stomaged, son combinaciones no tan habituales en Occidente pero que se han visto constantemente en el otro lado del mundo. Si a esto se le suma que los turcos no suelen medir bien las invasiones cuando no tienen la prioridad…
La suerte tiene nombre
Hasta este párrafo a alguno le habrá sorprendido la omisión de No “SnowFlower” Hoi-jong. La razón está en que tiene una sección propia, como así se hará en las presentaciones del resto de equipos del mundial: el coreano está demasiados escalones arriba del resto de su competición. SnowFlower es a la Turkish Champions League lo que Rasmus “Caps” Winther es a la LCS EU.
El coreano tiene uno de los mejores Tahm Kench del mundo entero y no estoy para nada exagerando. Para muchos SnowFlower podría estar hasta entre los tres mejores apoyos de Europa y una de las razones es su capacidad para reiniciar batallas grupales de una forma magistral. Desde escaramuzas hasta cincos contra cinco, SnowFlower sabe entrar y salir de las líneas de presión enemiga y romper todo el esquema táctico rival.
Además, es un jugador habilidoso y limpio. En la final realizó una jugada en la que salvó a GBM del Ryze enemigo con su Destello a milisegundos de ser asesinado su compañero. Su Rakan, Alistar y Braum raras veces fallan sus habilidades y suponen un martirio constante a los tiradores y medios rivales. Zeitnot a veces se desposiciona, pero no importa porque SnowFlower siempre está cerca.
La fase previa ha de ser un medio, no un fin
Sin saber los grupos de la fase previa del Campeonato Mundial todavía, es complicado dictaminar cómo quedará el equipo turco. Aun así, si no tiene demasiada mala suerte, su objetivo debería ser llegar a la fase de grupos y superar la etapa previa del torneo.
Tienen experiencia, jugadores habilidosos y además repiten bloque. Otros equipos de las regiones mayoritarias, como Edward Gaming y G2 Esports, no han mostrado la solvencia de otros años y podrían ser sorprendidos al no poseer mucha agresividad al principio. Si algo aprendió Winston Churchill hace más de 100 años es que los turcos nunca han de ser subestimados.
Agradecimientos a Marcus “Blumigan” Blom y Raúl “Rlocus” Fuentes por su colaboración en la realización de esta pieza.